Cuando me propusieron entrar en el proyecto político del partido socialista y me plantearon que áreas me gustaría llevar, lo tuve muy claro, quería y quiero defender la cultura de mi pueblo.
Aunque mi profesión nada tiene que ver con esta área, siempre lo he defendido de forma altruista y voluntaria participando activamente a través de asociaciones juveniles y culturales. Y, sinceramente, considero que esta es la forma más sana de defender nuestra cultura, desde el voluntariado, creyendo firmemente en ello y sin que exista ningún otro tipo de interés.
Cuando hablamos de cultura, en términos generales, nos referimos al conjunto de bienes materiales e inmateriales de un grupo social transmitido de generación en generación. Incluye lengua, procesos, modos de vida, costumbres, tradiciones, hábitos, valores, patrones, herramientas y conocimiento.
Y si todo esto es cultura, ¡cuánta riqueza tiene nuestra Totana!
Nuestras fiestas patronales, nuestras tradiciones, nuestro Carnaval, Semana Santa, La Santa, historia en nuestras calles, en rincones de nuestra ciudad, nuestra alfarería, nuestra música, yacimientos, Sierra Espuña, folklore tradicional, danza, teatro, cine, escritores, pintores… y un largo etcétera.
La cultura constituye uno de los sectores de oportunidades de desarrollo más dinámicos e importantes de nuestra sociedad, por lo tanto, deberíamos tomar conciencia de esta potencialidad vinculándola a la dinamización económica local y ver la cultura desde una doble dimensión, como derecho y como recurso, además de ser un factor de promoción de la imagen de la ciudad.
Todo esto podría dar lugar a tener programaciones culturales diversas y variadas durante todo el año, y por nuestra parte no quedará por aportar iniciativas en este ámbito, como la creación del Consejo Municipal de Cultura, la celebración de la Noche de los Museos, subvenciones a proyectos culturales por concurrencia competitiva, más espacios culturales y juveniles como la adecuación del bajo de la sala de lectura José Munuera y Abadía y la redacción del proyecto para cubrir el Auditorio municipal Marcos Ortiz, Plan de Reactivación cultural del municipio, etc.
Existe la necesidad imperiosa de cesión de espacios municipales dedicados a actividades culturales y un plan efectivo de apoyo a la cultura local, ya sea profesional o amateur. No más recortes en cultura que es siempre la peor parada en situaciones de crisis.
Es obvio que, en este mundo tan volátil, incierto y convulso, también nos olvidamos de que la cultura es la mayor fuente de riqueza que la humanidad posee. Nos olvidamos de que un pueblo sin cultura es un pueblo sin identidad, un pueblo abocado al olvido. Porque cultura, es el sinónimo más cercano a la acepción de compartir. Es el espejo donde se refleja el nivel de riqueza de un pueblo, es un mecanismo que nos facilita el respeto a nuestros antepasados, un amigo que nos acerca todo el conocimiento existente a nuestro presente y un maestro que nos prepara para el futuro.
Blasi Montes Pérez. Concejala del Grupo Municipal Socialista